Boyero de Appenzell
El nombre boyero de Appenzell deriva del cantón suizo de Appenzell, donde la raza se desarrolló en la forma actual. Hubo un tiempo en el que era conocido como «ToggenburguerTreibhund», es decir «Boyero deToggenburg», que es un pueblo en Appenzell.
Es el clásico perro medio de los valles y los pastos alpinos, muy difundido en toda Suiza. En 1906, la raza nació oficialmente, se redactó un estándar, y se fundó el club, gracias a la pasión de algunos liderados por el famoso naturista Max Siber. Su talento se ha conservado intacto hasta hoy, sin duda gracias al hecho de que el Appenzeller (como también se llamaba a la raza) siempre ha sido criado y seleccionado para el trabajo.
Incluso el gran escritor y cinólogo Piero Scanziani, padre del moderno Mastín Napolitano, tuvo un ejemplar en los años 70 de nombre Mani, que cita en alguno de sus libros. Bastante apreciado, además de en Suiza, en Austria y Alemania, en España e Italia, sin embargo, es poco conocido y criado.
Se trata de un perro muy ágil y vital, gracias a que su tamaño no es excesivo y le permite moverse fácilmente por cualquier terreno y con cualquier clima: nieve, lluvia, frío, calor, etc. El boyero de appenzell es muy alegre e inteligente, y está dotado de una buena capacidad para el adiestramiento.
Sabe conducir al ganado con una capacidad extraordinaria, y también es capaz de custodiarlo y protegerlo de los enemigos (ya sean otros animales o personas). Impone su autoridad incluso frente a los toros más fieros, y se erige como líder indiscutible del rebaño.
Ladra con determinación si observa algo anormal en su entorno para llamar con su voz la atención del propietario, y no duda en hacer frente a los intrusos si resulta necesario. El appezeller es un compañero fiel para toda la familia, dotado de un carácter fuerte y capacidad para el aprendizaje.
Por ello fue, y lo sigue siendo, muy apreciado en operaciones de socorro y rescate en alta montaña, así como perro de búsqueda en avalanchas (gracias en parte a su talla y su fuerza). En Suiza, la raza no se considera de compañía, y se sigue utilizando en los pastos para la guarda y la conducción del ganado.
Caracterizado por una particular forma de portar la cola, que se enrosca sobre la espalda en posición lateral, el boyero de Appenzeller es dinámico, activo e inteligente. Pesa entre 22 y 25 kg., midiendo entre 48 y 55 centímetros medidos hasta la cruz. Este perro tiene una esperanza de vida entre 10 y 12 años.