Colmillo Blanco

Colmillo Blanco es una novela del escritor estadounidense Jack London, una de las más representativas de su pluma, y publicada en 1906, como solía ser costumbre en aquellos días, a través de entregas regulares en la revista The Outing Magazine, de Caspar Whitney.

Algunos personajes principales

El protagonista de la historia es un lobo mestizo llamado Colmillo Blanco, hijo de una perra doméstica que se volvió salvaje, llamada Kiche, y un lobo conocido como Tuerto, líder de su manada. Los humanos con los que Colmillo Blanco tiene contacto son el indígena Castor Gris, el apostador de peleas de perros Smith “El Hermoso”, el ingeniero Weedon Scott y su empleado Matt.

Algunos otros animales tienen roles importantes en la obra, como Lip-Lip, que es un perro que vive con los indígenas y que le pone la vida difícil a Colmillo Blanco. O Collie, una perra pastora que termina siendo madre de los cachorros de Colmillo Blanco.

Género de la obra

A primera vista, la obra se puede considerar sin dudas como una novela de aventuras, en especial por los escenarios y los acontecimientos que se relatan en la misma. El éxito de esta novela entre el público joven también ha servido para que la misma sea clasificada como “novela juvenil”.  Esto se ha sometido a discusión, ya que al igual que la obra anterior de London, “La llamada de lo salvaje”, hay en ésta un ingrediente de violencia que algunos han considerado como impropio de una obra para la juventud.

También hay quien ha querido ver en la novela una narración figurada de la vida del autor, que vivió su temprana juventud en busca de aventuras en Alaska, para luego asentarse como hombre de familia en California. Pero hay diferencias en otros aspectos de la vida de London y el argumento de la novela, por lo que la idea de la autobiografía no es del todo verificable.

Resumen del libro Colmillo Blanco

La novela relata la vida de Colmillo Blanco, único cachorro de una camada de cinco, donde todos los demás murieron de hambre. Sus padres son el lobo llamado Tuerto, líder de una manada que se ha dispersado luego de ser repelidos por un grupo de humanos. Su madre es Kiche, una perra doméstica extraviada, y luego asilvestrada.

Al enfrentarse con una lince, logran vencerla, pero Tuerto muere en el ataque. Luego Kiche y el cachorro son hallados por un grupo de indígenas que reconocen a la perra como propia, y adoptan al cachorro, al que bautizan como Colmillo Blanco. Entre los indígenas el joven lobo enfrenta las primeras contrariedades al estar bajo el rechazo del perro líder: Lip-Lip. El cachorro se hace solitario y agresivo.

Castor Gris lleva posteriormente a Colmillo Blanco al pueblo, y un corredor de peleas de perros, Smith «El Hermoso», lo engatusa para que se lo venda a cambio de unas botellas de licor. Aquí tiene lugar la etapa más difícil en la vida del joven animal, al enfrentar las duras condiciones de las peleas de perros, además del trato despótico y cruel del corredor Smith. Haciendo uso de su fuerza, agresividad y afán de supervivencia, Colmillo Blanco derrota a un oponente tras otro, hasta que debe enfrentar a Cherokee, el bulldog de un apostador llamado Tim Keenan. La cruenta pelea está a punto de terminar con la muerte de Colmillo Blanco, cuando Cherokee logra una mordida con la que le está asfixiando.

En este punto ocurre la aparición providencial de Weedon Scott, un ingeniero de minas que se halla en la región buscando oro. Es un hombre adinerado, y logra detener la pelea para comprar a Colmillo Blanco. Durante los primeros intentos de domesticación, la relación no fluye bien porque Colmillo Blanco muerde a Scott, pero el ingeniero es convencido por Matt de darle una oportunidad. Los cuidados y el trato afectuoso surten efecto, y Colmillo Blanco llega a sentir un gran cariño por Weedon.  Tanto, que cuando el ingeniero debe regresar a su hogar en California, el lobo insiste en seguirlo, por lo que Scott se lo lleva a su mansión.

En California, Colmillo Blanco se siente fuera de lugar, sobre todo porque Collie, la perra pastora de la casa, le trata bastante mal. Pero demuestra su valía al salvar la vida del padre de Weedon, hazaña en la que casi muere. Al final de la novela, Colmillo Blanco se muestra viviendo apaciblemente, incluso llegando a tener una camada de cachorros con Collie.