El Cachalote

El cachalote (Nombre científico: Physeter macrocephalus) pertenece a la familia de los cetáceos. Es un animal de sangre caliente, y como los demás mamíferos, respira fuera del agua. Cuando sale a la superficie a respirar este mamífero lanza chorros de agua y aire por los orificios nasales, llamados espiráculos, luego estos se cierran al momento de sumergirse en el agua.



Características físicas

Poseen dientes cónicos para atrapar las presas sin que se resbalen, en su cabeza tienen ojos pequeños a cada costado y su cuerpo en  similar a un prisma rectangular con bordes redondeados. Poseen un cerebro relativamente grande, lo cual lo hace ser un mamífero muy inteligente. Tiene tres extremidades: dos aletas y una cola.

El cachalote se distingue por ser un animal que recorre grandes distancias en el fondo marino, y lograr un tiempo alargado debajo del agua sin respirar en la superficie. Algunos de estos ejemplares miden 18,5 metros de largo y alcanzan un peso de 70 toneladas.



Hábitat

El cachalote es un animal que pasa su vida en mares tropicales y templados de grandes profundidades.



Alimentación

Son carnívoros, y generalmente se alimentan de pulpos, calamares gigantes, peces y algunos tiburones. Pueden comer casi una tonelada de alimento al día.



Reproducción

La reproducción de este animal es muy escasa. Cuando se logran aparear dos ejemplares, hembra y macho, la hembra permanece 1 año y 3 meses en periodo de gestación. Una vez pasado el tiempo da a luz a una cría en el mar tropical. La cría llega a pesar 900 kilogramos y medir 3 metros, y se alimenta de la leche materna hasta los 40 meses. Es importante destacar que es un animal que tarda en llegar a la madurez, pudiendo alcanzarla hasta los 15 años.



Información general

Los cachalotes pueden crear grandes grupos de 30 a 100 ejemplares, generalmente compuestos solo por hembras y crías, para efectuar una mejor caza y lograr un trabajo en equipo. Son animales longevos y llegan a vivir hasta 72 años.

Tienen la capacidad de poder sumergirse más de 3.000 metros y permanecer bajo el agua por 2 horas. Mientras están sumergidos, el corazón baja los latidos a la mitad de las pulsaciones para que la sangre se dirija hacia los órganos principales, y permitirles sobrevivir con poco oxígeno.