El Siglo de Oro Español
Resumen, causas y consecuencias.
El Siglo de Oro Español fue un período, no sólo de la historia española, sino de la historia universal, caracterizado por grandes avances en diferentes campos del desarrollo humano, y que tuvieron su foco en España. Los académicos lo sitúan desde la última década del siglo XV, hasta mediados del siglo XVII; es decir, más de un siglo. Sin embargo, en el siglo XVIII se acuñó la expresión “Siglo de Oro”, por parte del historiador Luis José Velázquez. Está apegada al hecho de que el período abarcó todo el siglo XVI.
Tabla de Contenido
Antecedentes
El territorio peninsular fue en esencia un conjunto de reinos dispersos durante gran parte de la Baja Edad Media. Los reinos de Aragón y Castilla eran los que más se habían expandido. Sin embargo, eventos como la Peste Negra el el siglo XIV, habían diezmado la población. Pero el siglo XV fue de una paulatina recuperación, en particular en el reino de Aragón. En el territorio no había una burguesía establecida, además de que se usó la Inquisición como herramienta de control.
El siglo XV fue además el de la consolidación de la Reconquista, que es como se conoce a la recuperación del territorio de Al-Ándalus, ocupado por los musulmanes ochocientos años antes.
Protagonistas
Si bien el Siglo de Oro permitió las manifestaciones de diferentes exponentes universales de la cultura española, como Cervantes, se puede llegar a la conclusión de que sus principales protagonistas fueron los iniciadores del fenómeno: Los Reyes Católicos, Isabel de Castilla y Fernando de Aragón. Otro actor clave en el Siglo de Oro fue indudablemente Cristóbal Colón, el navegante genovés cuya aventura en busca de las Indias por el occidente llevó al descubrimiento de América.
Causas
Hacia finales del siglo XV se consolidó la unión del reino de Castilla y León con el reino de Aragón, a través del matrimonio de la Reina de Castilla, Isabel I, con Fernando II, Rey de Aragón, Sicilia y Cerdeña, en 1469. Bajo el reinado de éstos, llamados los Reyes Católicos, se completó en enero de 1492 la reconquista de Granada, provincia del sur de España, bajo el dominio del nazarí Boabdil, último rey musulmán de la región. Este triunfo fue luego ampliado cuando Cristóbal Colón, sin proponérselo, y con patrocinio de los Reyes Católicos, encontró un continente hasta entonces desconocido para los europeos. España comenzó un proceso expansivo cuyas consecuencias para todas las ramas del conocimiento fueron enormes.
Desarrollo de los acontecimientos
Tres acontecimientos se consideran determinantes en el inicio del Siglo de Oro español: la Reconquista de Granada, que hizo que España recuperase la integridad de su territorio. El siguiente fue el descubrimiento de América, a través del cual Cristóbal Colón llevó a los españoles el conocimiento sobre un continente que no conocían, y sobre el que expandieron su Imperio.
El tercer acontecimiento, más cercano a la producción intelectual autóctona, fue la publicación de la Gramática Española de Antonio de Nebrija. Fue la primera gramática de una lengua romance que se publicaba, ya que las anteriores se ocupaban del latín. Y aunque a la Reina no le pareció una obra útil, sus defensores argumentaron que podría servir para que los habitantes de eventuales territorios conquistados aprendieran el castellano. No sabían que a partir de ese mismo año, el tiempo les iba a dar la razón.
Durante el siglo siguiente, España creció para convertirse en la nación más poderosa de la Tierra, y su producción intelectual creció a la par; no sólo en la Península, sino también en los territorios conquistados. En el plano de las letras, por ejemplo, brillan nombres como Tirso de Molina, Juana Inés de la Cruz o Luis de Góngora. Y por supuesto, quien es considerado el máximo exponente de las letras españolas a través de una sola obra: Miguel de Cervantes Saavedra, autor de El Quijote.
Otra disciplina que ofreció mucho fue la pintura, que dejó obras de El Greco, y Diego Velázquez; en filosofía, Fray Bartolomé de las Casas fue de entre los primeros en reflexionar sobre el trato que se daba a los habitantes de los pueblos conquistados.
Acontecimientos posteriores
Los conflictos políticos en Europa, que inevitablemente afectaban a España, fueron definiendo una progresiva debacle en el poder político de la Península, no obstante que seguía siendo una poderosa nación. Hacia la segunda década del siglo XVII, estallaron conflictos como la Guerra de los Treinta Años. Dentro del marco de esa guerra se desataron hostilidades entre Francia y España, que terminaron en 1659 con el Tratado de los Pirineos. Fue la primera señal del fin del Siglo de Oro. El último de los representantes de la intelectualidad de este período fue el escritor Pedro Calderón de la Barca, que falleció en 1681.
España, en cuanto a su desarrollo cultural y político, ha tenido altos y bajos desde entonces, como la crisis de 1808 que terminó dando origen a la independencia de las colonias americanas. Y aunque no parece probable que logre un esplendor similar al del siglo XVI, sigue siendo uno de los países referenciales por excelencia.