Juan Salvador Gaviota

Juan Salvador Gaviota es un relato corto escrito por el autor y aviador estadounidense Richard Bach, y publicada en 1970. Tuvo excelente recepción, sobre todo en la comunidad estudiantil, y ha sido extensamente traducida a distintos idiomas.

Algunos personajes principales

El personaje central es una gaviota llamada Juan Salvador Gaviota (John Livingston Seagull en el original). En algún momento de la historia, Juan conoce a otra gaviota más sabia llamada Chiang, de quien obtiene gran aprendizaje. Algo después, conoce a Pedro Pablo Gaviota (Fletcher Lynd Seagull) que se convierte en su discípulo.

Género de la obra

En algunos textos se menciona que Juan Salvador Gaviota es una fábula. El autor, en el título original, agregaba la expresión “A Story” (un cuento o relato). También puede considerarse una novela corta, dada su extensión. Las tres interpretaciones se pueden considerar correctas; aunque en favor de la primera opera el hecho de que todo ocurre en medio de una sociedad de gaviotas que recuerda ligeramente a una sociedad humana medieval, entregada a prejuicios y limitaciones, mientras que el protagonista intenta hacerles salir de ellas.

Resumen del libro Juan Salvador Gaviota

En la primera parte, Juan Salvador Gaviota es simplemente eso: una gaviota que vive en la costa, y es parte de una bandada de aves que se dedican a conseguir comida: del mar o de los barcos. Para ellos el vuelo es sólo la herramienta que les permite desplazarse y obtener el sustento. Y es acá donde Juan se diferencia del resto de la bandada: su interés mayor en la vida es volar. Volar más alto, más rápido, más lejos. Juan desea aprender los principios fundamentales del vuelo, nada más que por el placer de lograrlo. Y eso a la bandada le parece anormal. También le parece anormal a los padres de Juan.

Juan Salvador, en su afán de aprender, ha sufrido percances que le hacen considerar el regreso a la vida “normal”. Pero pronto los olvida. En cierta ocasión, luego de un vuelo particularmente rápido, Juan es llamado al centro de la bandada por el Consejo, y condenado al exilio en los acantilados. En el exilio, lejos de amargarse, Juan logra perfeccionar sus capacidades, y se va haciendo viejo. Un día, mientras volaba, es abordado por dos gaviotas que saben volar como él, y le dicen que es hora de ir a casa. Juan piensa que su vida llegó a su fin, y que irá al cielo.

En la segunda parte, Juan llega a una playa donde hay algunas gaviotas, muchas menos que en su bandada, pero con la diferencia de que estas gaviotas tienen el mismo gusto que él por aprender sobre el vuelo. Además, su cuerpo ya no se siente viejo. Pronto Juan aprende que no murió ni fue al cielo, pero aún no comprende bien lo que ocurre. Sigue practicando y aprendiendo sobre el vuelo, y en sus conversaciones con Chiang, la gaviota más antigua y sabia, aprende que ha trascendido sus limitaciones corporales, ascendiendo a otro nivel. Pero que aún tiene que seguir aprendiendo para alcanzar la perfección. Aprende con Chiang a transportarse instantáneamente si lo desea, y su evolución sigue en ascenso. Chiang deja ese mundo, convirtiéndose Juan en el nuevo líder, de manera natural.

Juan continúa su labor de enseñar a los principiantes y a los que desean aprender sobre la naturaleza del vuelo, cuando le asalta la idea de volver a la bandada donde nació. Cada vez se convence más de que allá lo necesitan más, que allá debe haber una o dos jóvenes gaviotas intentando descubrir los secretos del vuelo, y enfrentando la oposición del resto de la bandada.

En la tercera parte, Juan conoce a Pedro Pablo Gaviota, un joven impulsivo que acaba de ser exiliado de su antigua bandada. Se convierte en su mentor, y empieza a enseñarle lo que puede hacer con el vuelo. Pronto otras gaviotas exiliadas se le unen, y forman un pequeño grupo de aprendizaje. Eventualmente, deciden regresar del exilio hacia la bandada, lo cual provoca una conmoción. Las capacidades de los recién llegados causan rechazo y admiración al mismo tiempo, y poco a poco logran que algunas otras gaviotas se les unan. Pero las habilidades de Juan, todavía difíciles de comprender por la bandada, hacen que lo consideren un dios o un demonio. Juan rechaza ambas ideas, pero decide que ya es hora de ir a ayudar a otra bandada, y deja a Pedro, al que considera preparado para instruir al grupo.



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1 respuesta

  1. José Ignacio Cifuentes Martinez dice:

    Excelente libro de crecimiento y superación, donde la disciplina y la constancia y un objetivo claro, al logro de la perfección

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