Los sedimentos oceánicos
Cada año, millones de toneladas de rocas pulverizadas, de arena convertida en polvo, de cenizas y de restos de organismos marinos se depositan en el fondo del océano.
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Sedimentos transportados por el aire y el agua
Los ríos, el hielo y las aguas de arroyada arrastran hasta el océano restos de rocas erosionadas. Las cenizas de los volcanes y el polvo proveniente del desierto son transportados por el viento y las precipitaciones. Las partículas mas gruesas llegan rápidamente al fondo, mientras que las más finas se decantan después de un largo período en suspensión.
Estos sedimentos, llamados terrígenos, representan cada año cerca de 20,000 millones de toneladas. A ellos hay que añadir los restos de algas calcáreas, valvas de animales y esqueletos o fragmentos de huesos de animales. Estos otros sedimentos, llamados biógenos, se depositan en cantidades mucho menores: de 1 mm. a 2 cm. cada 1,000 años.
Por último, una gran parte de los sedimentos marinos está producida directamente por los océanos: tanto por las erupciones de los volcanes submarinos como por la precipitación química de los elementos disueltos en el agua del mar.
El transporte y el depósito de los sedimentos depende del tamaño de las partículas y de la velocidad de la corriente. Cerca de la orilla, los materiales más gruesos, en los que se mezclan restos de rocas, de valvas, de algas calcáreas o de corales, sufren la acción del oleaje, de las olas y de las corrientes creadas por las mareas y son arrastrados hasta el donde forman pliegues y dunas. La duración del transporte y la distancia recorrido llevarán a cabo la selección de dichos sedimentos, puliendo más o menos sus aristas
Avalanchas submarinas
Los sedimentos acumulados en el borde de la plataforma continental pueden provocar avalanchas. Varias decenas de kilómetros cúbicos de sedimentos se deslizan por el talud continental a una velocidad aproximada de 100 km/h, y se depositan sobre cientos de kilómetros en la llanura abisal situada al pie del talud.
El relieve y las corrientes hacen la selección
Por regla general, el diámetro de los sedimentos disminuye a medida que aumenta la distancia a la costa y la profundidad. Con dos exepciones: los accidentes del relímite externo de la plataforma continental. En estos casos, la acción del oleaje es más fuerte y sólo resisten las arenas de mayor grosor. Estas arenas y gravas descienden por las pendientes en forma de avalanchas, a lo largo de cañones submarinos, y se esparcen en las llanuras abisales en forma de grandes abanicos.
Cuanto más pequeños son, más lento es su descenso. Una partícula de 1 pm tarda 500 años en bajar a 5000 m. Su decantación da lugar a los lodos rojos de los grandes fondos marinos. O bien se mezcla con los restos de organismos planctónicos. Si éstos son de naturaleza silícea, como las diatomeas o los radiolarios, las pequeñas partículas llegarán hasta el fondo.
Muy buenas notas del mundo en que vivimos me gustaria recibir estos apuntes en mi correo mas frecuentemente, graciad