Pastor de los Pirineos

El pastor de los Pirineos se usaba antiguamente en las montañas de Francia para cuidar los rebaños de ovejas. Son perros nocturnos, lo que hace que duerman todo el día, y de noche estén cuidando su territorio, lo que los convierte en excelentes guardianes.

Son perros independientes, y esto hace que sea una raza difícil de adiestrar. Por lo que será indispensable comenzar desde muy pequeños y, sobre todo, tener mucha paciencia.

Son perros muy resistentes y pueden llegar a correr grandes distancias.

Su aspecto es adorable, su pelaje es de color blanco y tiene una doble capa de pelo para resistir diferentes tipos de climas. Sus características orejas son caídas. Su pelo largo y abundante requiere de un buen cepillado, todos los días. Hay que estar consciente que largará mucho pelo, por lo que es usual que la casa esté llena del mismo.

En sus patas traseras tienen dos garras, siendo una de las pocas razas que las tienen, ya que la mayoría de los perros tienen sólo una garra en las patas traseras.

Miden entre 37 y 55 cm., medidos hasta la cruz, y pesan entre 7 y 15 Kg. Viven entre 10 y 14 años.

La enfermedad más característica de estos perros es el cáncer de huesos, especialmente cuando son grandes, aunque también es común que sufran de artritis.

El pastor de los Pirineos es un perro ideal para todo tipo de familias, y se lleva muy bien con los niños. Hay que tener en cuenta que requiere de ejercicios todos los días.