Dolly: La oveja más famosa del mundo

El nombre de Dolly dio la vuelta al mundo y su nacimiento conmocionó a la opinión pública y al mundo de los investigadores. Y aún sigue dando de qué hablar.

Una noticia asombrosa

La oveja Dolly nació el 5 de julio de 1996 en el Instituto Roslin (Escocia). La noticia de su nacimiento se hizo pública el 23 de febrero de 1997. La imagen del primer clon de un mamífero adulto, aparentemente similar a cualquier otra oveja, dio entonces la vuelta al mundo.

El acontecimiento que Dolly representa obedece al hecho de que fue creada a partir de una célula adulta diferenciada proveniente de la mamá de una oveja de seis años. Es decir, Dolly es el primer mamífero nacido sin que se haya dado una fecundación.

dolly oveja

Dolly es la reproducción fiel, con algunas excepciones, de un ser ya visto. El hecho de ser producto de un óvulo obtenido sin la intervención de una célula sexual masculina no implica novedad ni diversidad alguna. Su nacimiento sorprendió al mundo porque abría la posibilidad de prescindir de la reproducción sexual para concebir un ser vivo. La aplicación de esta técnica en la especie humana suscitó de inmediato un gran temor en la opinión pública y despertó la fantasía de la clonación humana.

Una proeza técnica

Al dar nacimiento a la oveja Dolly, el equipo escocés dirigido por el investigador Ian Wilmut realizó una proeza técnica. De hecho, por primera vez logró vencer el principal obstáculo en este tipo de experimentos: la necesidad para el núcleo de la célula asexual transferida de adaptarse al ovocito receptor y de integrar las señales que este último le envía.

Hasta antes de este éxito, este tipo de transferencia llevaba, por el hecho mismo de que las dos células fusionadas estaban en fases diferentes, a una replicación del ADN y luego a una división celular anárquica con una repartición desigual de cromosomas entre las células hijas.

El resultado de esto solía ser la detención del desarrollo embrionario. Wilmut tuvo la astucia de cultivar las células asexuales en un medio nutritivo empobrecido antes de proceder a la transferencia de su núcleo. En estas condiciones, las células estaban en un estado de reposo (quiescencia) que implicaba la detención de su división celular.

Su transferencia a este estado favorecía la sincronización entre los programas de ambas células. El establecimiento de un diálogo armonioso, el núcleo y el ovocito permitió que se llegara a un desarrollo embrionario y finalmente al nacimiento de la famosa Dolly.

Cuestionamiento definitivo

Mas allá de la proeza técnica, Dolly constituía la prueba definitiva de que una célula diferenciada puede revertir el tiempo y regresar al estado embrionario, cuando su núcleo transferido a un ovocito es privado de su material genético. Hasta entonces, la diferenciación en el mamífero era un proceso irreversible y, por lo tanto, retaba inconcebible que el núcleo de una célula somática pudiera regresar a su estado embrionario, iniciar la división y originar un ser vivo.

Estrella internacional

Verdadera estrella, Dolly es, sin duda alguna, la oveja más famosa de la historia. Varias revistas le dedicaron números completos e inspiró una gran cantidad de artículos publicados en todo el mundo. Un museo incluso decidió conservar un suéter fabricado con su lana. Creada a partir de una célula de glándula mamaria, la oveja debe su nombre a la cantante estadounidense Dolly Parton quien, además de una linda voz, tiene un pecho exuberante.



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