Akita Inu
El akita, akita ken, akita japonés o akita inu es un perro japonés bastante reservado, callado y con un carácter fuerte hacia aquellos con los que no haya socializado anteriormente. Adiestrarlo representa un reto para sus dueños. El akita es una raza bastante leal y cariñosa con aquellos con los que ha creado un vínculo, es buen perro familiar mientras se sepa criar de una forma adecuada para evitar accidentes, especialmente con otros perros.
Esta raza ama la nieve y las bajas temperaturas, y probablemente sufran de calor si viven en áreas calurosas.
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Características físicas
Esta raza es de gran tamaño, con una figura bastante robusta y musculosa y una cabeza ancha. Su nariz es oscura, generalmente negra, sin embargo esta puede presentar despigmentaciones, especialmente en akitas de pelaje blanco. Sus ojos pequeños, de color café, y con una forma triangular, y su cola se caracteriza por estar enroscada sobre su lomo. Por último, sus orejas son puntiagudas y están erguidas.
El peso de un akita inu adulto varía entre 22 y 45 kg., e incluso puede alcanzar los 50 kg. La altura hasta la cruz en los machos es de un promedio de 67 cm., sin embargo, puede alcanzar los 71 cm. Las hembras son más pequeñas, en ellas la altura va de 61 cm. hasta un promedio de 66 cm.
En cuanto al pelaje, es de longitud media o corto (pero se pueden encontrar ejemplares con un pelaje más largo) y consiste en dos capas. Este puede poseer cuatro colores distintos: blanco (el cual es poco común), atigrado, rojo y sésamo.
La esperanza de vida va entre los 10 a 12 años generalmente, pero puede alcanzar los 15.
Salud
El akita inu, como todos los perros, puede llegar a tener varios problemas de salud. Entre estos se encuentran: lesiones en las rodillas, displasia de hombros, cataratas, problemas de tiroides, fallo renal crónico, enfermedades en la piel, displasia de caderas, glaucoma, entropión, problemas en la sangre y problemas de caries.
Otra cosa que es importante mencionar en cuanto a salud es que un 32% de akitas mueren a causa de cáncer, mientras que un 14% mueren a causa de problemas gastrointestinales y cardíacos.
Un poco de historia
Sus orígenes provienen de la isla Honshu, ubicada en Japón, y es una mezcla entre el kari japonés, chow chow y el tosa inu.
Originalmente se empleó para la caza de jabalíes, e incluso osos, y se usó como perro protector y guardián. Luego pasó a ser perro de pelea y la raza sufrió cambios, ya que a menudo se cruzaba con el tosa inu para obtener perros aún más agresivos. De esta forma dio origen a otra raza: el shin akita, la cual ya no existe.
Más tarde, al final de la Segunda Guerra Mundial,en Japón se prohibió tener perros por la escasez de comida, la única raza permitida fue el pastor alemán, por lo que muchas personas cruzaron sus akitas con pastores alemanes para intentar salvar a la raza. Los soldados se llevaron a muchos de estos perros cruzados a Norteamérica, y esto dio origen a otra raza: el akita americano.
Información a tomar en cuenta si decides tener uno
Algo que se debe tomar en cuenta al momento de escoger a este animal como mascota es que el mismo puede llegar a ser ilegal en algunos países, o de requerir permiso en algunos otros: España, Estados Unidos, Irlanda, Bermudas, Malasia, Ucrania y Singapur.
El akita inu suele soltar mucho pelo y requiere de cepillados diarios para liberarse de los pelos sobrantes. Algo bueno es que no requiere de idas al peluquero para mantener su pelaje.
En los machos se puede presentar dominancia y agresividad hacia otros perros.
Si se quiere un perro fácil de adiestrar, tal vez el akita no sea adecuado, ya que es bastante difícil para aprender órdenes y se debe ser paciente.
Se adapta considerablemente bien a la vida en espacios pequeños como apartamentos, ya que no necesita estar activo todo el día, sin embargo, sí es necesario que el perro no padezca una vida sedentaria y que realice algo de ejercicio diario.
Los akitas son muy posesivos con su comida, por lo que hay que tener cuidado, especialmente al principio cuando aún se le enseña al perro que él no es el que manda.
Por último, cabe mencionar que son perfectos guardianes, ya que son desconfiados con los extraños y sólo ladrarán cuando sea necesario, ya que no son muy dados de este hábito.